La mayoría de los casos de sarcoma uterino no se puede prevenir. Aunque la radiación pélvica aumenta el riesgo de padecer un sarcoma uterino, el beneficio de la radiación a la pelvis en el tratamiento de otros cánceres compensa por mucho el riesgo de padecer un cáncer poco común (como el sarcoma uterino) muchos años después.