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Radioterapia para el cáncer de testículo

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La radioterapia utiliza rayos (como los rayos gamma o los rayos X) o partículas de alta energía (como los electrones, los protones o los neutrones) para destruir las células cancerosas o disminuir su crecimiento. En el tratamiento del cáncer testicular, la radiación se usa principalmente para destruir las células cancerosas que se han propagado a los ganglios linfáticos.

La radioterapia en la que una máquina dirige radiación a una parte específica del cuerpo se conoce como radiación de rayos externos. El tratamiento es muy similar a la radiografía, pero la radiación es más intensa. La radiación no causa dolor. Antes de iniciar el tratamiento, el equipo médico tomará cuidadosamente medidas para determinar los ángulos correctos para emitir los haces de radiación, y las dosis adecuadas de radiación. Cada tratamiento dura unos pocos minutos, aunque el tiempo de preparación (acomodarle en el lugar para recibir el tratamiento) generalmente toma más tiempo.

Por lo general, la radioterapia se usa principalmente en pacientes con seminoma, el cual es muy sensible a la radiación. Algunas veces se utiliza después de la orquiectomía (operación para extirpar el testículo) y se dirige a los ganglios linfáticos de la parte trasera del abdomen (ganglios linfáticos retropertoneales). El propósito de esto es eliminar fragmentos diminutos de cáncer en aquellos ganglios linfáticos que no se puedan ver. Además, la radioterapia se puede usar para tratar cantidades reducidas de seminoma que se han propagado hacia los ganglios (con base en los cambios que se aprecian en las tomografías computarizadas y las tomografías por emisión de positrones).

La radiación también se utiliza a veces para tratar el cáncer testicular (seminoma y no seminoma) que se ha propagado a órganos distantes (como al cerebro).

Posibles efectos secundarios de la radioterapia

La radioterapia puede afectar al tejido sano adyacente junto con las células cancerosas. A fin de reducir el riesgo de los efectos secundarios, los médicos determinan cuidadosamente la dosis exacta que usted necesita, y dirigen el rayo para alcanzar el tumor. A menudo, el tratamiento del cáncer testicular incluye el uso de radiación a dosis más bajas de las que se necesitan para otros tipos de cáncer.

Algunos efectos secundarios comunes son:

  • Cansancio
  • Náuseas
  • Diarrea

Algunos hombres presentan cambios en la piel, tales como enrojecimiento, ampollas o descamación de la piel, aunque estos no son comunes.

Con el paso del tiempo, estos efectos secundarios se alivian al terminar el tratamiento. Si la radiación alcanza al testículo sano puede afectar la fertilidad (recuentos de espermatozoides).  Por lo tanto, se coloca un escudo protector sobre el testículo restante.

La radiación también puede causar algunos efectos a largo plazo, tal como daño a los vasos sanguíneos o a otros órganos cercanos a los ganglios linfáticos tratados. También puede aumentar el riesgo de un cáncer posterior (fuera del testículo) en el futuro. Estos riesgos fueron mayores en el pasado cuando se usaban dosis más elevadas y se exponía más tejido a la radiación.

Para más información, consulte Radioterapia.

Equipo de redactores y equipo de editores médicos de la American Cancer Society

Nuestro equipo está compuesto de médicos y enfermeras con postgrados y amplios conocimientos sobre el cáncer, al igual que de periodistas, editores y traductores con amplia experiencia en contenidos médicos.

Actualización más reciente: mayo 17, 2018

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