Muchos de los síntomas del cáncer de colon también pueden ser el resultado de afecciones distintas al cáncer, como una infección, hemorroides, el síndrome de colon irritable o una enfermedad inflamatoria intestinal.
En muchos casos, las personas que presentan estos síntomas no están enfermas de cáncer. Aun así, la presencia de cualquiera de los síntomas es una indicación de que debe consultar con un médico para determinar la causa y tratar la afección, si se necesita:
Cuando la causa de los síntomas resulta ser cáncer de colon, con frecuencia la manifestación de ellos se hace visible únicamente cuando el cáncer se ha propagado. Es por eso que lo mejor es someterse a exámenes de detección del cáncer de colon antes de presentar síntomas. Cuando el cáncer de colon se descubre en sus etapas iniciales a través de exámenes de detección (es decir, pruebas que se realizan sin que la persona presente síntomas), podría ser más fácil de tratar. Los exámenes pueden prevenir el surgimiento de cáncer colorrectal al descubrir y permitir que se extirpen tumores precancerosos conocidos como pólipos.
El cáncer colorrectal a menudo no genera síntomas hasta que se encuentra en etapa avanzada, y datos recientes indican que el número de casos nuevos de cáncer colorrectal está aumentando en personas más jóvenes. Es por esta razón que la Sociedad Americana Contra El Cáncer recomienda hacer las pruebas de detección para el cáncer colorrectal de forma periódica a partir de los 45 años de edad para las personas en riesgo promedio. Las personas con un antecedente familiar de esta enfermedad o con ciertos factores de riesgo deberán consultar con su médico sobre hacer las pruebas de detección a una edad más temprana. Se pueden realizar diversos exámenes para determinar la presencia del cáncer de colon. Hable con su médico para ver cuáles pruebas son las más adecuadas para usted, y consulte con su compañía de seguro médico sobre su cobertura. Independientemente de la que escoja, lo más importante es hacer la prueba de detección.
Cuando el cáncer de colon se detecta temprano, antes de que se haya propagado hacia alguna parte, la tasa de supervivencia de 5 años es del 90%. Esto significa que 9 de cada 10 personas a las que se les detecta cáncer en etapas iniciales sobreviven como mínimo 5 años. Sin embargo, si el cáncer se ha propagado a otras zonas del cuerpo además del colon, las tasas de supervivencia disminuyen.
Si su médico encuentra algo sospechoso durante una revisión médica o un examen de detección, o si usted presenta alguno de los síntomas asociados al cáncer de colon, usted necesitará hablar sobre cualquier exámen médico o pruebas de seguimiento que se recomienden para encontrar la causa.
Su médico necesitará elaborar una historia clínica completa en busca de síntomas y factores de riesgo. Es espcialemente importante que se informe sobre su historial médico familiar (antecedentes de salud en la familia) . Alrededor 1 de cada 3 personas que desarrollan cáncer colorrectal tienen otros familiares (especialmente padres, hermanos o hijos) que han tenido este tipo de cáncer (de todas maneras, la mayoría de los casos de cáncer colorrectal se manifiestan en personas que no tienen antecedentes familiares de la enfermedad).
Tener otros problemas de colon puede aumentar su riesgo de cáncer colorrectal. Esto incluye pólipos precancerosos, colitis ulcerativa, enfermedad de Crohn y síndromes hereditarios como poliposis adenomatosa familiar (PAF) o cáncer de colon hereditario sin poliposis (HNPCC, en inglés), también conocido como síndrome de Lynch. Tener diabetes tipo 2 también puede aumentar su riesgo, al igual que ciertos hábitos como una alimentación no saludable y la falta de ejercicio.
Como parte de un examen físico, su médico palpará cuidadosamente su abdomen y también examinará el resto de su cuerpo en caso de ser necesario. También podría requerir que se realice ciertos análisis de sangre para determinar si usted tiene cáncer de colon.
Es posible que su médico también le recomiende otros exámenes, tales como una colonoscopia u otros estudios exploratorios o de imagen de la región del colon. En caso de que existan sospechas fundadas de la existencia de cáncer colorrectal, será necesario hacer una colonoscopia para extraer muestras de cualquier tejido (biopsia). En una biopsia, el médico extirpa una parte pequeña de tejido con un instrumento especial que pasa a través del colonoscopio. Las muestras de la biopsia se analizan con la ayuda de un microscopio para detectar la presencia de células cancerosas.
Si le diagnostican cáncer de colon, el tratamiento depende del tipo de cáncer que sea y cuán temprano se detectó la enfermedad. Puede que el tratamiento puede incluir cirugía, radiación, quimioterapia, terapias dirigidas e inmunoterapia. Es importante que pueda hablar franca y abiertamente con su médico, y si no entiende algo, que pueda hacer preguntas.